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Salgan del sueño de la vela
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Viaje a través de las filosofías indias de la Liberación
Rimini 2008
Edición para bibliófilos, en quinientos ejemplares numerados, impreso por la Escuela Superior de Filosofía Oriental y Comparativa de Rímini con motivo del décimo aniversario de su fundación (1997-2007)
Páginas: 78
Ilustraciones: 59
Encuadernado: En cartoné brillante, dorso redondo con cadeneta doblada en 8 y estuche negro troquelado
Colación: 8 pnn, 66 pn, 4 pnn
Ilustraciones: guaches sobre papel rajasthani (en su mayoría)
Colofón: 500 ejemplares marcados con números árabes y firmados a mano
Papel: Old Mill gr. 130, marfil, Cartiere Fedrigoni di Verona
Impresor: Pazzini di Verucchio


Introducción:

Un hombre soñado por Shakespeare afirmó que estamos hechos de la misma materia que los sueños;  para las filosofías indias de la Liberación no se trata de una interjección del desconcierto o una metáfora; sino que es la directa enunciación de una verdad exacta. Lo es hasta tal punto que, una vez iluminado, Siddhartha Gautama se dijo «Buddha», «el Despierto». Hasta ese logro, el hombre pasa la vida adormecido en el sueño de la vela, tironeado por todas partes por el afán sexual (kama), que siempre es el blanco de toda acción, arreglándoselas por cumplir con los deberes ético-religiosos (dharma) que la sociedad le achaca, o por trajinar para imponer su interés (artha). Tres actividades, por supuesto, útiles para la continuación de la especie, hasta tal punto que el pensamiento tradicional hindú enfila para cada actividad una inmensa literatura. Sin embargo, el hombre que comprende sus calidades seductoras, anhela escabullirse de ellas, así como se suele deshacer de un sueño o distraerse de las circunstancias que distraen. Desenredándose de los tres fines de la vida, en un estado de olímpica imperturbabilidad como puro espejo del mundo, él afirma que la vida no es sino una aparencia, un juego, una farsa, un encantamiento, un sueño de la divinidad inmóvil que está indivisa dentro de cada hombre. Desde los Vedas hasta hoy, la metafísica india – la doctrina que declara que el universo, incluido el tiempo y el espacio y nosotros también, no es sino una aparencia o un torbellino de aparencias  – ha sido profesada y analizada de diferentes formas por muchos pensadores; aunque en su variedad, nunca fueron inducidas por una simple curiosidad intelectual, sino por un objetivo casi ignorado por la filosofía europea: extinguir el sueño de la vela aspirando a la Liberación (moksa). Como matrioskas que encierran varias dimensiones interiores, las doctrinas indias admiten por ratos la salida del pantano del tiempo, permitiendo sonreir a los espejismos del mundo, como en un sueño matutino a través del cual trasluce la realidad; antes de despertarse de la ignorancia, o del sueño, o de la vida.